Ocho cristianos asesinados en Egipto por celebrar la Navidad

El funeral por los coptos muertos

Protegido por la policía para evitar que el fanatismo islamita vuelva por sus fueros

Ocho cristianos y un policía musulmán murieron y otras nueve personas resultaron heridas bajo los disparos de un hombre armado que viajaba en un coche con otras dos personas.

Los agredidos salían a una hora cercana a la medianoche de la iglesia Anba Basaya, en la localidad de Naya Hadimi, 600 kilómetros al sur de El Cairo, tras celebrar la misa que inicia la Navidad según el rito copto, el 7 de enero.

A causa de ello, un millar de cristianos coptos se enfrentaron a las fuerzas de seguridad pidiendo igualdad de trato frente a los islámicos. La policía local ha confirmado la reciente detención de los tres sujetos, fichados anteriormente a causa de otros hechos similares aunque de menor gravedad.

Basura fabricada para justificar el crimen

Las agencias de noticias a sueldo del Islam han dicho que el crimen es justificable. ¿La causa? Unos días antes había sido secuestrada y violada una niña musulmana en la zona de la iglesia, y se culpaba del hecho a un joven cristiano. Auténtica basura fabricada para justificar semejante acto criminal, que por desgracia es un jalón más en la persecución que sufren los cristianos en Egipto.

Sin embargo, el hecho es considerado por la policía egipcia como el incidente religioso más sangriento desde hace veinte años, cuando grupos islámicos organizados se dedicaban a asesinar sin tapujos a los cristianos. Tras el suceso se impuso en Naya Hamadi el toque de queda y se ha desplegado un operativo policial para detener a los atacantes.

Los coptos representan el diez por ciento de la población de Egipto y la mayor comunidad cristiana de Oriente Medio que ve cómo se extermina a los adherentes de las iglesias pertenecientes a esa confesión.